Tratamiento endovascular de aneurismas de aorta abdominal: implante de endoprótesis aórtica
El aneurisma de aorta abdominal consiste en la dilatación progresiva de la aorta pudiendo evolucionar a la ruptura de la misma y consecuente muerte del paciente. Debe intervenirse precozmente para evitar este desenlace fatal.
La técnica de tratamiento clásica ha sido la cirugía, pero ya desde la década de los 90 contamos con la posibilidad de tratamiento endovascular, es decir accediendo a la aorta por medio de catéteres, reduciendo así en forma sustancial las complicaciones cardiovasculares, mortalidad y estadía hospitalaria, principalmente en grupos específicos de riesgo como ser aquellos pacientes con enfermedad respiratoria y cardíaca, función renal deteriorada y edad avanzada.
El procedimiento endovascular consiste en colocar un tubo llamado Endoprótesis aórtica dentro de la aorta en la zona del aneurisma. Este injerto de stent “forra” la aorta como una funda interna y se mantiene en su lugar después del procedimiento. La sangre fluye a través del injerto y no ejerce presión sobre las paredes del aneurisma.
El mayor desafío de las técnicas transcatéter consiste en la factibilidad técnica dependiente de la morfología del aneurisma. Para cada dispositivo existen requerimientos morfológicos específicos para asegurar el éxito del procedimiento. Sin embargo, el desarrollo de nuevos dispositivos ha permitido extender la técnica a pacientes con anatomías cada vez más complejas.
El procedimiento se realiza con una mínima sedación y anestesia loco-regional en la sala de hemodinamia, accediendo al aneurisma a través de las arterias femorales bajo guía fluoroscópica.
